Construyendo sostenibilidad para la cadena de soja en el gran chaco argentino

Con financiamiento del Land Innovation Fund, CREA y ACSOJA se unen para la implementación de un proyecto de soja sostenible con la participación de 100 productores y alcance de 250 mil hectáreas.

Con el apoyo del Land Innovation Fund, el Consorcio Regional de Experimentación Agrícola (CREA) y la Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (ACSOJA) se han unido para implementar un proyecto dedicado a la promoción de modelos sostenibles de producción de soja en la región del Gran Chaco argentino. Con una duración de 36 meses, la iniciativa tiene como objetivo establecer y validar, con al menos 100 agricultores en un área de aproximadamente 250 mil hectáreas, modelos de intensificación ecológica agrícola que mantengan o aumenten los rendimientos del productor rural, reduzcan las pérdidas de cultivos, conserven áreas naturales dentro de las granjas, contemplen la restauración de suelos y ambientes degradados y apliquen indicadores ambientales, centrándose en el carbono del suelo y la biodiversidad. El proyecto con CREA y ACSOJA es uno de los cuatro en implementación con el apoyo del Land Innovation Fund en el Gran Chaco, bioma prioritario para el Fondo junto con el Cerrado y la Amazonía.

Nombrado "Herramientas para la sostenibilidad ambiental y socioproductiva del cultivo de soja en los sistemas del Gran Chaco argentino", el objetivo es promover la producción sostenible con la soja como componente fundamental del proyecto. "El eje es la soja, aunque el cultivo de grano se da en rotación con otros cultivos de la región y hay mucha integración con la ganadería. Es decir, ese proyecto se centra en la soja, pero como un componente clave dentro de todo un sistema de producción", explica Federico Fritz, Líder de Proyecto de Indicadores Ambientales en CREA.

El proyecto parte del análisis de datos proporcionados por los productores rurales para la identificación, validación y difusión de modelos agrícolas más sostenibles, que cumplan la legislación vigente, mantengan o amplíen los ingresos de los productores y mejoren los indicadores ambientales, con énfasis en el carbono. La iniciativa también prevé el incentivo para la conservación de áreas de vegetación nativa, la restauración de áreas degradadas, la mejora del capital social, así como acciones de integración de toda la comunidad rural. El proyecto se implementará en tres etapas, a lo largo de tres años: diagnóstico (2022), para el desarrollo de línea de base; implementación de herramientas previamente definidas y difusión de los primeros resultados (2023); y consolidación del sistema productivo sostenible e identificación de puntos críticos (2024).

La alianza entre CREA y ACSOJA le da al proyecto una perspectiva de mercado y resalta la importancia de combinar acciones productivas y sostenibles para asegurar la competitividad de los productores rurales argentinos en un mercado internacional cada vez más exigente. "Es fundamental que Argentina haga un plan para reducir la deforestación. En todo el mundo, nuestros clientes están aumentando su atención a la necesidad de una agricultura sostenible. Si no alineamos la producción con las exigencias de la legislación internacional, corremos el riesgo de ser excluidos del mercado", afirma el presidente de la Asociación, Luiz Zubizarreta.

Para el productor rural y miembro de CREA Juan Carlos Cotella, el proyecto en implementación con el apoyo del Fondo agrega valor y conocimiento a los agricultores. "Acciones como ésta nos dan una visión a largo plazo y nos hacen reflexionar sobre cómo nos estructuramos para sembrar y cosechar buenos resultados, productivos y socioambientales", dice. Para Juan Martín Ficco, productor en Salta y miembro de CREA, las acciones en sinergia amplían el alcance y la relevancia de las actividades. "Esas instituciones pueden darnos la fuerza técnica para trazar, junto con otros productores, un camino consistente hacia la sostenibilidad productiva y ambiental", dice.

Con el proyecto, el Land Innovation Fund tiene como objetivo fomentar la difusión de la capacitación y la adopción de herramientas capaces de reducir los impactos ambientales y expandir el uso de prácticas agrícolas sostenibles en la cadena de suministro de soja, alineando las necesidades del productor con las exigencias para la agricultura baja en carbono y climáticamente inteligente. "CREA tiene una historia de trabajo en grupo, compartiendo conocimientos y habilidades para mejorar los resultados técnicos, económicos, sociales y ambientales del productor rural, una pieza clave en la transformación agrícola del siglo XXI y los proyectos en ejecución por el Fondo. Solo con el compromiso y el conocimiento del productor podremos desarrollar modelos de producción más sostenibles", dice Carlos E. Quintela, director del Land Innovation Fund. "El trabajo en colaboración entre CREA y ACSOJA amplía la diversidad de los actores y el alcance de los resultados obtenidos con el proyecto", añade. 

La iniciativa con CREA y ACSOJA es una de las cuatro en implementación en el Gran Chaco con financiación del Land Innovation Fund.  Socios de diferentes segmentos, que van desde el tercer sector hasta la esfera pública, además de entidades de clase, las instituciones ayudarán a sentar las bases para un desempeño 360º del Fondo en una de las áreas ambientalmente más vulnerables de América Latina. "Las iniciativas estimulan el diálogo entre múltiples voces en la agenda de sostenibilidad regional y buscan soluciones sinérgicas que contribuyan al desarrollo agrícola sostenible, la mitigación del cambio climático y la valorización del bosque en pie en la región”, agrega Quintela.

Desempeño del Fondo en el Gran Chaco:

Un bioma que cubre aproximadamente 850.000 km² en áreas de Paraguay, Bolivia y Argentina, el Gran Chaco ha estado registrando, desde los años de 1990 y especialmente desde los años 2000, una de las tasas de deforestación más altas del mundo debido a la creciente presión para convertir los ecosistemas naturales en tierras agrícolas, especialmente para el cultivo de soja.

El portafolio del Fondo para el Gran Chaco incluye a las instituciones AACREA, CIARA, Fundación ProYungas y Solidaridad Regional, que operan en formato de consorcio con otros socios importantes de la región: la Fundación ProYungas, dedicada a la conservación y el desarrollo sostenible, en alianza con la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (AAPRESID) y la Fundación Moisés Bertoni, de Paraguay, apoyarán la adopción de buenas prácticas agrícolas y el secuestro de carbono en cinco granjas piloto en el bioma Gran Chaco; la Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (AACREA), se ha unido a la Asociación Argentina de la Cadena de la Soja Argentina (ACSOJA) para crear modelos de desarrollo sostenible con al menos 100 agricultores en el país; la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA), en asociación con Peterson-Control Union (PCU) y la Bolsa de Comercio de Rosario, implementarán una plataforma integrada para monitorear y verificar toda la soja vendida en Argentina; y Solidaridad Regional, en asociación con instituciones de Bolivia y Paraguay, mapeará y definirá criterios y protocolos de soja sostenible para la región, en sinergia con las recomendaciones del mercado internacional.

Los cuatro proyectos en implementación en Argentina amplían las operaciones del Land Innovation Fund en el Gran Chaco. Desde que inició sus actividades en América del Sur, en enero de 2021, el Land Innovation Fund ha construido un portafolio de 28 proyectos en implementación por 34 socios seleccionados por rondas de financiación o por invitación directa a instituciones estratégicas de la región. En común, acciones, proyectos e iniciativas promueven el desarrollo de un panorama de innovación para una cadena de suministro de soja sostenible e inteligente para el clima en tres biomas prioritarios: Cerrado, Gran Chaco y Amazonía. "Sabemos que temas complejos requieren soluciones de innovación en múltiples vías de acción, desde la implementación de prácticas agrícolas responsables hasta políticas públicas favorables al desarrollo sostenible, desde mecanismos financieros que permitan pagos por servicios ambientales hasta la participación de múltiples actores en el debate sobre sostenibilidad. Queremos actuar como catalizadores de la innovación en favor de una economía verde e inteligente para el clima, con el productor rural como eje de todas nuestras acciones", explica Carlos E. Quintela, director del Land Innovation Fund.