Proyecto refuerza las bases del desarollo sostenible en el norte argentino

Con el apoyo del Land Innovation Fund, CProyREA y ACSOJA construyen un legado de datos y conocimiento técnico-científico para la gestión agrícola responsable en el Gran Chaco. 

Durante dos años, en un trabajo continuo de articulación entre múltiples actores de la cadena de suministro agrícola, la Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (AACREA), en asociación con la Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (ACSOJA) y con el apoyo del Land Innovation Fund, construyó un legado de herramientas, indicadores y sistemas de monitoreo para una gestión agrícola sostenible alineada con la agenda ambiental internacional. Con un enfoque en el bioma Gran Chaco, la propuesta fue consolidar datos, calificar información y compartir conocimiento para mejorar la toma de decisiones en el campo. 

Participaron en la iniciativa 178 productores de 375 propiedades rurales en un área de 246 mil hectáreas monitoreadas en el norte grande argentino. Con el proyecto, se desarrollaron y mejoraron modelos de producción capaces de mantener o aumentar los rendimientos del productor rural; reducir las pérdidas de cosechas; conservar las áreas naturales dentro de las propiedades rurales; contemplar la restauración de suelos y ambientes degradados; y aplicar indicadores ambientales, con enfoque en carbono del suelo y biodiversidad. En común, todas las acciones implementadas por CREA tuvieron la sistematización y consolidación de información integrada como base para la adopción de buenas prácticas agrícolas a gran escala. 

Acciones integradas en tres dimensiones:

Con una mirada tridimensional, CREA mejoró herramientas y definió indicadores que contemplaran los aspectos productivos, sociales y ambientales de la propiedad rural. “Sabemos que la sostenibilidad es un proceso de mejora continua. Por eso, generamos herramientas, conocimiento e interacción para crear marcos de referencia y ayudar en la toma de decisiones en el campo”, explica Laura Carabaca, líder del proyecto en asociación con el Fondo. La propuesta de la institución es ofrecer a los asociados las bases tecnológicas y de conocimiento para medir y seguir los resultados que contribuyan al desarrollo agrícola sostenible. 

En el eje productivo, el programa identificó posibles fallos de rendimiento en las cadenas productivas de la soja y el maíz y propuso mejoras en el manejo agrícola. Para ello, se recopilaron, analizaron y consolidaron datos de más de 12 mil lotes con cultivos asociados de soja y maíz en más de 1,2 millones de hectáreas en cinco regiones del norte grande argentino. Para cada modelo productivo, se estimaron el rendimiento potencial (porcentaje máximo), el rendimiento alcanzable con la adopción de buenas prácticas agrícolas, el rendimiento actual y las fallas de rendimiento. La cuantificación y calificación de la información se incorporaron a la plataforma de datos y sirvieron como punto de partida para la toma de decisiones. 

Construido en asociación con Aapresid y AACS, el protocolo de medición de carbono del suelo publicado por CREA es una herramienta metodológica importante, unificada y de fácil adopción, para el análisis de CO2 en diferentes escenarios productivos en Argentina –para agricultura, ganadería, silvicultura o sistemas silvopastoriles– y posibilidades de manejo en el campo. 

Por su parte, InBioAgro, una iniciativa coordinada por CREA con la participación de múltiples instituciones asociadas en Argentina y el apoyo del Land Innovation Fund, permitió el monitoreo de la biodiversidad en doce propiedades rurales dedicadas al cultivo de soja, ubicadas en la región de Salta, Tucumán, Santiago del Estero y Córdoba, en el norte grande argentino. “Con la iniciativa, apostamos por la generación de espacios de colaboración entre productores y especialistas para identificar indicadores y prácticas de gestión en nivel de propiedad, basados en conocimientos técnico-científicos avanzados”, explica Federico Fritz, líder del proyecto en CREA. 

El monitoreo cubrió indicadores de identificación de especies de aves, vegetación, insectos polinizadores, macro y mesofauna del suelo, además de un levantamiento de mamíferos mediante el uso de trampas fotográficas. Los resultados obtenidos en el monitoreo servirán como punto de partida para la elaboración de informes para cada campo piloto, la definición de objetivos de conservación y el diseño de estrategias de mejora, fomentando la biodiversidad en general y/o de grupos biológicos específicos. 

O monitoramento cobriu indicadores de identificação de espécies de aves, vegetação, insetos polinizadores, macro e mesofauna do solo, além do levantamento de mamíferos através da utilização de armadilhas fotográficas. Os resultados obtidos no monitoramento servirão de ponto de partida para a elaboração de relatórios para cada campo piloto, definição de objetivos de conservação e desenho de estratégias de melhoria, fomentando a biodiversidade em geral e/ou de grupos biológicos específicos. 

Autoevaluación social:

Con el apoyo del Fondo, fue la primera vez que CREA desarrolló e implementó indicadores para la dimensión social de la gestión de las propiedades. Técnicos de todas las áreas participaron en la construcción del cuestionario de autoevaluación. Actualmente, ya se han respondido 108 cuestionarios de autoevaluación, proporcionando un retrato de las prácticas de empleo, relaciones con proveedores y comunidad, gobierno y sociedad, además de la transparencia en la gestión, practicadas por productores rurales de pequeño, mediano o gran tamaño en la región.

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