Oídos de la Naturaleza
Detección de anomalías en el Cerrado a través del sonido usando tecnología IoT e IA
Oír el sonido de los bosques para detectar cambios en el ecosistema, prever la necesidad de posibles acciones preventivas en la propiedad o medir el alcance de buenas prácticas agrícolas, contribuyendo a la reducción de costos, mejores condiciones de producción y conservación del medio ambiente. Esta es la propuesta de Green Bug, un startup que utiliza tecnología de Internet de las Cosas e Inteligencia Artificial para detectar sonidos del ecosistema, transmitir los resultados a una base de datos y monitorear cualquier alteración de ruidos en el área mapeada –desde el cambio de la población local de aves o en el patrón de visitas estacionales hasta el inicio de brotes de incendios–.
El conjunto de datos permite un análisis de las características generales de la región monitoreada –desde el área de cultivo hasta los pastizales, desde las unidades de conservación hasta las áreas de preservación permanente– con informaciones a corto, mediano y largo plazo relevantes para el productor rural y, en definitiva, también para la comunidad científica y la iniciativa privada.
Los datos son recogidos por un dispositivo electrónico alimentado por energía solar y baterías con microcontroladores capaces de realizar algoritmos de inteligencia artificial, detectar y clasificar eventos, transmitir los resultados a la plataforma web y traducir esos sonidos en números para mapear la dinámica de cada microrregión, generando alertas sobre variaciones o anomalías de antemano. Las informaciones son útiles tanto para mensurar riesgos como para medir el alcance de las acciones de preservación, como la recuperación de paisajes, la creación de corredores ecológicos, la instalación de perchas para aves, entre otras buenas prácticas agrícolas.